Como entidades vivas que son, los Cuatro vientos poseen su propio temperamento. El viento del este siempre es bueno y hasta sosega a los otros vientos cuando pierden el control. El viento del oeste no es tan bueno. El viento del sur a veces es uno y a veces otro. Y el viento del norte los mantiene a todos bajo control. Aún así, el poder del viento del norte es eficaz solamente mientras ejerce su influencia para moderar a los otros vientos. Por sí solo podría ser destructivo y haría que "hasta el oro perdiera su valor". El viento del sur tiene un temperamento más difícil, llegando a veces a la manía. El sur es el hogar del Río de la Diversidad. Lo mismo que los demás vientos, se modera ante el viento del norte, el lugar del Río de la Unidad Simple o de la quietud. Y así moderado en su ímpetu, el viento del sur es una bendición para los frutos de la tierra.
-Tamud babilónico, Gittin 31b, Yoma 21b, Baba Bat'ra 25a
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